
De las máscaras que me he quitado no quiero hablar. De las que me he puesto mucho menos. Podríamos hablar de las oscuras angustias que me azotan cuando intento mirar al sol sin cerrar los ojos, o a la luna sin abrirlos. Pero tampoco debería, porque vas a pensar que es por ti, y mis secretos saben la verdad, que es por otro, que es por mi. Sobre todo por mi. Que me cuesta recordar lo que quema el... todo cuando no sabes lo que te hace daño.
Desconozco si me apetecía una alegoría de mi tristeza o una elegía a la vida tranquila que llevaba, pero lo que es cierto es que, probablemente, sea la esquela más larga que podía dedicarle a un corazón inestable.
4 comentarios:
una palabra, y mi alma se hizo pedazos.
...otra vez.
demasiadas cicatrices
para tanto dolor.
sigue transmitiendo. yo seguiré absorviendo, comprendiendo,vislumbrando, intuyendo... entendiendo(me). gracias. jasz
Estoy escasa en palabras ultimamente, pero lo primero que me ha venido a la cabeza al leerlo ha sido la canción "i don't know what to do with myself"
Ole.
...por un momento pensé que iba por mí.
Xses.
Ángel.
Me siento una intrusa leyendo tus pensamientos y sentimientos pero no he podido contener el impulso de escribirte; me he llevado una sorpresa al saber que tenías un blog. Quiero darte las gracias por tus comentarios y por enlazarme al tuyo.
Espero que algún día cercano pueda leer que todas esas cicatrices y el dolor han desaparecido para siempre. Un abrazo
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