Las noches eternas

Hay noches que son más largas que otras.

No es debido a los solsticios o los equinocios, que nunca sé cuál es cuál. Sólo hay noches más largas que otras. Hay noches eternas.

Hay noches en las que te visitan fantasmas y ángeles, y hay noches en las que no sabes muy bien a cuál de los dos prefieres recibir.

Algunas noches te visitan fantasmas disfrazados de ángeles -esos son los peores- y te despojan de toda la esperanza de una vida mejor.

Las noches eternas son de color violeta. Te tiñen las manos, para que no puedas acariciarte el alma. Te tiñen el alma, para que no puedas tocarla con las manos.

Las noches eternas son de color violeta y en ella sueñas que la vida nunca existió.